DIARIO ; 11 de Octubre.
Son las diez de la
mañana. Me acababa de despertar. No había podido dormir casi nada ya que me
seguía preguntando si tanto le costaba a mi madre regalarme un teléfono, si no
tenia ganas o si piensa que todavía soy muy pequeña para tenerlo, no se, pero
desde luego que ayer me llevé una gran desilusión al ver esto, un libro en
blanco, sin nada, ni ilustraciones ni escrituras, completamente en blanco.
Todo el mundo según mi
madre dice que la idea de escribir un diario te ayuda a expresar tus
sentimientos, a contar experiencias, a reflexionar sobre momentos de tu vida…
Pero sinceramente yo no le veo el sentido ya que supuestamente es un diario
personal y solo lo voy a poder leer yo.
Eran las diez de la
mañana. Nattchris se acababa de despertar, lo sabíamos porque la habíamos escuchado
levantarse a coger un libro, el reloj o incluso pensamos que podría haber
cogido su diario ya que el suelo de madera de su habitación cruje siempre que
se pisa. Íbamos a ir a darle los buenos días. Pero pensamos que era mejor
dejarla escribir o leer un poco ya que ayer se cabreo porque no le regalamos lo
que quería, un teléfono. Por nuestra opinión es demasiado pequeña para tenerlo,
ya sabemos que todos o casi todos sus amigos tienen uno, pero no nos importa. Pasaron
veinte minutos y Nattchris bajó las escaleras y se dirigió a la cocina para
desayunar, no nos habló. Nosotros pensamos que le tenemos que dar un poco de
tiempo para que se le pase.
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